La misma palabra de parte de Jesús

TESTIMONIO #006

Quiero a través de este medio dar las gracias por su Comunidad y sus Adoraciones. Mi testimonio de ayer en la Adoración:

La primera lectura que leyó Adriana, Isaías 41, 8-14, me había salido por la mañana en el Santísimo, pidiéndole al Señor una palabra para mí. Fue muy fuerte llegar a la Adoración en Paiporta y escuchar por boca de esta chica —que por cierto está muy ungida del Señor—, que me estaba dando la misma palabra de parte de Jesús.

Es maravilloso como el Señor os utiliza y a ella le ha dado ese don de la alabanza, porque esas palabras llegan directas al corazón; por supuesto a usted también. Hay mucha comunión entre ustedes y esto se transmite. Es hermosa la Adoración.

Muchas gracias, me hizo muy bien que el Señor me confirmara esa palabra. Mi alma lo necesitaba. Que Dios os bendiga cada día con más unción para que sigáis en esta linda misión.

Un abrazo en Cristo,

Paloma.

Es la Luz de Cristo

TESTIMONIO #005

Gracias Jesús por permitirnos estas Adoraciones tan llenas del Espíritu Santo. Gracias padre Salvador, músicos, Adriana y a todos los demás. Nos hacéis sentir en el mismo Cielo. Cuando esta chica Adriana empieza a hablar de los ángeles, siento que están ahí Adorando a nuestro Señor; es una preciosidad. Había a mi lado una mujer que no paraba de llorar. Es que se siente mucho la presencia de nuestro señor Jesús en este lugar. Bendito sea Dios. Y cuando el padre va con la custodia, va lleno de una luz que casi enceguece. Es la Luz de Cristo.

Bendiciones para todos. Hoy he preguntado por las chicas que adornan el altar, Ana y Teresa. Aunque hoy no vi a Ana, también les envío muchas bendiciones porque hay que ver cómo lo dejan de precioso. Que Dios os siga bendiciendo.

Enhorabuena y gracias por traernos el Cielo a Paiporta y que lo compartáis por aquí.

La hija pródiga que ha vuelto a casa del Padre

TESTIMONIO #004

He de decir que no me gusta el Facebook, pero hace unas semana una amiga me llamó para que sintonizara una Adoración que estaban retransmitiendo por aquí, y al escucharla fue impresionante lo que sentí, una unción muy grande, al igual que esta que he escuchado hoy.

Se siente la presencia viva y real del Espíritu Santo. Además tocó mucho mi corazón cuando la persona que habla dijo que Jesús la invitaba a remar mar adentro; acojo esta palabra de Lucas 5, 4 porque ya me la habían profetizado y mi corazón estaba endurecido para escucharla y querer hacer la voluntad de Dios.

Gracias Comunidad Somos hijos de Dios por retransmitir esta belleza de Adoración a nuestro Rey y Salvador Jesús. Y gracias padre Salvador, es usted un gran instrumento del Señor. Dios les bendiga. Mi nombre es María Magdalena. Por lo que soy esa mujer María a la que la chica se refería. Soy la hija pródiga que ha vuelto a casa del Padre.

¡Gloria a Dios! Dios los bendiga.

Dios actúa a través de internet

TESTIMONIO #003

¡Amén! Gloria a Dios.

Creo que soy la persona que se ha sanado de los dolores de cabeza, porque de casualidad empecé a escuchar esta Adoración, y gran sorpresa cuando el padre Salvador dio esa palabra de que el Señor estaba sanando a alguien de dolores de cabeza. Ya no me duele y llevaba toda la semana con fuertes dolores. Que Dios bendiga al padre Salvador y a la chica que habla y a los músicos. Tenéis voces angelicales. Gracias, padre Salvador y Comunidad Somos hijos de Dios. Gracias, Dios, porque actúas a través de internet. Te vales de todo para llegar a los necesitados.

Isabel Mendez.

Una experiencia personal

TESTIMONIO #002

Día 28 de octubre de 2018

En la Iglesia de San Ramón de Paiporta teníamos un cura nuevo, don Salvador Romero, y ese día hacía la Adoración al Santísimo. Llegué y nada más entrar me emocioné. Pensé que allí había algo precioso. Había una luz y un resplandor inmensos, pensé que era parte de la decoración. Cuando acabó estaba muy emocionada y con mucha paz. Cuando acabó, el sacerdote pasó la custodia entre la gente. La custodia llevaba una luz y un resplandor inmensos.

Día 11 de noviembre de 2018

Cuando llegué, la custodia resplandecía en la mesa del altar, desprendía una luz tan grande que mis ojos no se apartaban de allí. Todo el tiempo estuvo así. Yo solo tenía ganas de llorar y lo hacía en silencio. Cuando acabó y el sacerdote pasó la custodia entre la gente, llevaba una luz y un resplandor tan grandes que me cegaba. El sacerdote paró la custodia un momento delante de donde yo estaba con otras personas. No le podía ver la cara al sacerdote pues me deslumbraba aquella luz inmensa, aquel resplandor… No sé explicarlo de otra manera. La luz resplandeció frente a mí hasta que se acabó la celebración. Salí de allí con una paz inmensa.

Día 25 de noviembre de 2018

Entré en la Iglesia y la custodia tenía el mismo resplandor y la misma luz. Ese día, a mi lado había un matrimonio. La chica lloraba, el sacerdote se paró delante, le puso la mano en la cabeza, yo no podía mirar por el resplandor que emanaba de la custodia, una luz inmensa.

Día 9 de diciembre de 2018

Entré en la iglesia. Ese día don Salvador no estaba, había otro sacerdote. Pensé que llevaba otra custodia pues esta era mate y así fue hasta el final.

Había visto tres veces una luz muy grande que resplandecía y me cegaba. Pensé que había dos custodias. Le pregunté al sacerdote y me dijo que era la misma. La única conclusión que saco es que el Espíritu Santo enviaba un mensaje de luz a mi vida.

Pepita.

No luches contra Dios

TESTIMONIO #001

Algo me llevó a ver la Adoración después de cenar por el Facebook. Me puse los auriculares porque no le oía muy bien a usted; no estaba muy atenta, pero al escuchar (lo resumo) sobre una persona que callaba algo y debía decirlo, miré al Señor y dije: «No puede ser; no vas en serio.» No podía creerlo. Más adelante escuché: «No luches contra Dios.» Qué dolor interior. Algo se quebró dentro de mí. El cuerpo empezó a reaccionarme en el sillón. Menudo susto se dio mi marido. Un temblor interior, quería llorar y no podía. Un año llevo luchando contra la voluntad del Señor.

Un abrazo padre Salva. Dios le bendiga.